sábado, 8 de noviembre de 2014

Anti pacto

Ciudad adentro

LAURA CASTRO GOLARTE (lauracastro05@gmail.com)

Desde hace ocho años más o menos, y está publicado en varios periódicos y libros, el analista y académico Edgardo Buscaglia ha señalado de manera insistente que en México prevalece un pacto de impunidad entre los partidos políticos que mientras no se rompa desde adentro, mantendrá al país en esta espiral de violencia y corrupción en la que está inmerso; y, agrego, con el grave riesgo de un estallido a causa del hartazgo de la sociedad en general.
A raíz de la desaparición de los 43 jóvenes estudiantes de la Normal de Ayotzinapa el 26 de septiembre pasado, el académico ha estado insistiendo, sobre todo en medios internacionales, sobre la urgencia de que la comunidad mundial respalde a la sociedad civil mexicana como la única fórmula para que el Estado mexicano, desde adentro, purgue el sistema.
En una entrevista para la DW (Deutsche Welle) reiteró la existencia de ese pacto de impunidad y añadió que personajes como Carlos Navarrete, del PRD, ya lo han reconocido, sin embargo, hasta ahora no se hace nada para acabar con él y empezar una labor profunda y auténtica de saneamiento del Estado mexicano.
Buscaglia aporta una serie de medidas muy concretas con base en las experiencias de Colombia, Estados Unidos, India e Italia, que contemplan, por un lado, la movilización constante y pacífica de la sociedad civil (cero violencia porque sirve de pretexto al Estado mexicano para criminalizar y descalificar; sería contraproducente pues, aunque en este sentido es importante acotar que, por lo mismo, se sabe que desde células del poder se mandan infiltrados para saquear y “reventar” las manifestaciones generando indignación, rechazo y temor) y, por otro, el respaldo de la comunidad internacional, particularmente de entidades globales como la Unión Europea o la Organización de las Naciones Unidas, por sólo mencionar dos, para presionar el Gobierno y emprender los cambios profundos en la estructura gubernamental.
El investigador de la Universidad de Columbia no se quedó ahí sino que hizo una agria crítica al Gobierno alemán (y el medio en donde fue entrevistado es alemán, algo significativo) porque Alemania criticó y presionó fuertemente para que una situación muy similar de corrupción y narcotráfico en el Gobierno de Colombia se combatiera efectivamente y se logró limpiar, por ejemplo, 63 % del Poder Legislativo de ese país. Ahora, dijo Buscaglia, Alemania está haciendo negocios cuantiosos en México y “el dinero les calla las conciencias” (la entrevista completa está disponible en esta liga, muy recomendable: http://www.dw.de/buscaglia-en-m%C3%A9xico-hay-un-pacto-de-impunidad/a-18001753).
¿Qué medidas propone Buscaglia? Desde la sociedad civil, manifestaciones pacíficas y masivas, paralización del sistema económico para obligar al Estado a comenzar la purga. Y, una vez logrado eso, para empezar la limpieza: “habría que implementar en la práctica, a través de causas penales, los tipos penales relacionados con el conflicto de interés: tráfico de influencias, malversación y desvío de fondos, que son los tres tipos de corrupción política más frecuentes. Hay que reformar los códigos penales para que el conflicto de interés se tipifique como delito… Esto es un trabajo del Poder Legislativo y tiene que hacerse de manera urgente”.
En este contexto ¿servirá de algo el pacto que propone el Presidente? Sólo que sea un anti pacto, es decir, una medida para acabar con el pacto de impunidad que prevale entre los partidos políticos.
Las exigencias sociales para que los 43 jóvenes aparezcan cuanto antes y vivos se están convirtiendo en el detonador de movilizaciones sociales que expresan el hartazgo no sólo por la impunidad, la corrupción y la violencia, las agresiones contra jóvenes y estudiantes, sino con respecto al sistema, obsoleto y podrido. Si no se hace algo ya, las consecuencias pueden ser muy dolorosas.


Publicado en El Informador el sábado 8 de noviembre de 2014.