sábado, 25 de julio de 2020

Pian pianito

Ciudad Adentro

LAURA CASTRO GOLARTE (lauracastro05@gmail.com) 

Así decía mi mamá cuando quería referirse a algo que caminaba despacito, pero seguro; y para reconocer la perseverancia o la persistencia en una meta hacia la que se avanzaba pian pianito con una gran determinación y voluntad. Poco a poco quiere decir, es una expresión coloquial muy usada, ojalá que todavía, en el mundo de habla hispana, aunque proviene del italiano. Pero bueno, no es el punto del comentario tal expresión que, dicho sea de paso, me gusta mucho.

El punto es que promesas y anuncios que se plantearon desde hace meses, han ido caminando pian pianito y a dos o más años de distancia, tenemos los primeros resultados. Me puse a hacer un repaso de las columnas a principios de año, para ver cuál fue la primera que escribí sobre Covid-19 y me encontré cuestiones muy interesantes que confirman que hay una ruta trazada y que si bien, los tiempos han variado, entre otras cosas, por la pandemia, se han ido cumpliendo compromisos.

Por ejemplo, la columna del 11 de enero de este año, hace seis meses, cuando la amenaza de un nuevo coronavirus ya se cernía sobre la humanidad, se la dediqué a una reunión recién celebrada entre el Presidente de México y los padres y deudos de los 43 jóvenes desaparecidos de la Normal de Ayotzinapa. Se anunció entonces que en febrero o marzo habría noticias sobre los avances en las investigaciones, y lo único que pasó es que fue hasta julio que se cayó la “verdad histórica” con la que la administración de Peña Nieto pretendía cerrar el caso. Sobre este asunto hay dos novedades, una, en realidad, es una mala noticia: falleció de Covid-19 el magistrado que ordenó crear la Comisión de la Verdad y Acceso a la Justicia para este caso, Héctor Gálvez Tánchez, que en paz descanse. Y la otra, es que inició el proceso de extradición de Tomás Zerón, acusado de tortura. Pian pianito.

El otro tema es el de Emilio Lozoya. Fue detenido en febrero de este año y escribí al respecto, porque varios opinólogos decían que ese caso y el de Genaro García Luna en realidad eran distracciones. Increíble de verdad, cuando los clamores por justicia son añejos, cuando urge atajar a la impunidad y que se rindan cuentas. Allá ellos y sus conciencias. El caso es que en febrero inició un proceso que llegó a otra etapa con la extradición desde España del exfuncionario. Es importante que se llegue hasta las últimas consecuencias y que respondan todos los que están involucrados. Justo ayer, en una de las primeras declaraciones de Lozoya, se publicó que ya confirmó el pago de sumas millonarias a diputados para que se aprobara la reforma energética peñista, panistas como Ricardo Anaya incluidos. Y que tanto Peña, el entonces presidente pues, como Luis Videgaray, secretario de Hacienda, no sólo estaban enterados, sino que fueron los que encabezaron tal “estrategia”. Salió eso y que Odebrecht pagó cuatro millones de dólares que se gastaron en la campaña presidencial de Peña Nieto. Peña, Peña, Peña. Esto tiene que llegar hasta sus últimas consecuencias. Se sabe que podrían salir raspados personajes como Felipe Calderón, incluso se habla hasta de Salinas de Gortari, el expresidente. Pian pianito.

Y, finalmente, me encontré otra columna, también de febrero, del 29 (este es año bisiesto), sobre una manifestación rala afuera del INE en Guadalajara, que dizque para defenderlo. En aquella ocasión, la “airada” protesta se dio poco después de que Lorenzo Córdova, el polémico y cuestionado presidente del organismo, adelantara el proceso de sustitución del titular de la Secretaría ejecutiva del INE, para que los nuevos consejeros, nombrados apenas esta semana en un hecho inédito (fue por unanimidad después de negociaciones intensas y nada tersas), no intervinieran en el asunto. Córdova lo logró en su momento, la Secretaría ejecutiva es una pieza clave en el tablero del Consejo electoral y falta una nada para que inicie el proceso con miras a las elecciones de 2021, a nivel federal intermedias, y varias locales que incluyen cambio de gobernador. Como siempre, el INE en la mira. Ya veremos, pian pianito, cómo se aviene el nuevo Consejo y cómo se conducirá en los procesos que vienen.

Las cosas van caminando, a otro ritmo sin duda, por obra y gracia de la pandemia, pero nada se ha detenido, y sí debo destacar la iniciativa que tiene entre sus objetivos mejorar el sistema de pensiones de los mexicanos.

Falta mucho por ver, que se finquen responsabilidades, que se haga justicia, que se llame a cuentas a quien se tenga que llamar; los pendientes y rezagos son tremendos y las circunstancias complican todo, pero hay indicios de que sí, de que muchas cosas están cambiando, pian pianito. 

Columna publicada en El Informador el sábado 25 de julio de 2020.

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