domingo, 2 de junio de 2013

Pobrecitos

Ciudad adentro

LAURA CASTRO GOLARTE (lauracastro05@gmail.com)

En las últimas semanas ha ido creciendo el anecdotario de personajes que hacen gala de su soberbia y prepotencia, se les conoce ya como ladies a las mujeres y gentleman a los hombres y hasta tienen sus hashtags en Twitter y se convierten en trending topics, tanto, que hasta casi parece que es el objetivo, casi.
A través de las redes sociales, de hecho, gracias a ellas en muchos casos, nos enteramos prácticamente en tiempo real de la prepotencia por ejemplo, de la hija del ahora ex procurador de la Defensa del Consumidor o, más recientemente, de la senadora Luz María Beristain, quien le dijo a la empleada del mostrador de una aerolínea que era senadora “a ver si así ablandaba su corazón”.
Hay ejemplos también de hombres y mujeres que no forman parte de la clase política pero son parientes o amigos de algún funcionario; y no faltan las personas que por su nivel económico también caen en este tipo de actitudes como aquel famoso gentlemen de Las Lomas.
No son nuevas, han existido desde ¿siempre? Y no creo que se acaben pero sí he notado que se han incrementado en los últimos meses. También está el ejemplo del llamado “niño Verde” (mal llamado, de hecho) que se negó a ser recluido en el “Torito” como se le conoce en el Distrito Federal al lugar en donde son encerrados quienes no pasan la prueba del alcoholímetro. Después ya fue con todo lo necesario para tener una estancia cómoda en el lugar, pero igual recurrió a sus influencias para “escaparse” en el momento.
Es para destacar que todos estos personajes hayan sido expuestos gracias a Twitter y Facebook, el problema, me parece, es que estas notas están quedando en el nivel de anécdota y no hay cambios en las actitudes y la conducta en general de la clase política.
Ya en redes sociales, con todos los recursos para manipular fotografías, agregar textos y otros elementos, estos individuos son la diversión de todo mundo y vaya que con el ingenio que nos caracteriza como pueblo, las carcajadas son imparables.
Si, si, muy divertido pero… ¿Qué está pasando? ¿Qué está detrás de esta prepotencia de la clase política? No se le puede atribuir al PRI, partido que ha trascendido entre otras cosas por los charolazos y prácticas por el estilo, pero resulta que por lo menos en los ejemplos de hoy, también hay Verde y Amarillo; y personajes del PAN generaron escándalos en su momento, por la soberbia y la prepotencia (ahí está la mentada de Emilio González Márquez que no me deja mentir).
He escrito en este espacio, en repetidas ocasiones, que la clase gobernante va por una vía y la sociedad mexicana por otra, sin intersecciones o cruces a la vista, al contrario, hasta parece que se alejan, se bifurcan. Pues bueno, todo indica que esto se agrava y profundiza porque lejos de poner remedio, de cambiar las actitudes, se está atacando directamente a la sociedad mediante el influyentismo y los abusos de poder. La senadora Beristain ejemplifica el modus operandi de muchos políticos y de su forma de pensar, de su falta de sensibilidad. Lo que falta es que efectivamente se cree una fiscalía especializada contra la discriminación a los políticos… pobrecitos.

Publicado en El Informador el sábado 1 de junio de 2013.