sábado, 19 de octubre de 2019

Pensiones


Ciudad Adentro

LAURA CASTRO GOLARTE (lauracastro05@gmail.com)

Aun cuando el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, aclaró que su comentario sobre aumentar la edad para pensionarse fue respuesta a una pregunta expresa y en ningún sentido se debe interpretar como una postura, el tema está en el aire desde hace tiempo. Se retoma, se abandona, se vuelve a él y así.
La razón, en gran medida, es que se trata de una tendencia mundial; los sistemas de pensiones están presionando las economías de los países de manera directamente proporcional al fenómeno demográfico determinado por el incremento en la esperanza de vida. Y por supuesto que la conexión económica global es indiscutible; independientemente de dónde empiece, el efecto sería tipo dominó.
A raíz de las declaraciones de esta semana me metí a buscar información sobre los sistemas de pensiones y prácticamente en todo el mundo, el mundo capitalista para ser más precisos, es un tema a discusión desde hace varios años, complejo, polémico, pero, eso sí, de urgente atención por su estrecha vinculación a los sistemas económicos y fiscales.
Dijo Gerardo Esquivel, subgobernador del Banco de México, que por cuestiones económicas, fiscales y demográficas, será inevitable aumentar la edad de retiro; sin embargo, hay opiniones en el sentido contrario. A diferencia de los dos citados hasta aquí, de que aumentar la edad repercutiría en más ingresos a la hora del retiro, José Luis de la Cruz, del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, entrevistado para Forbes México, dijo lo siguiente: “Pretender incrementar la edad de retiro de tres años para que a partir de ello se pueda posponer el retiro de algunos millones de mexicanos pues no resolvería el problema, lo único que haría es (que) se trasladaría tres años más tarde, pero en esencia el problema persistiría” (Nota de Forbes). En otras palabras, es más un problema de ahorro que de edad (por cierto, sobre este punto, no he visto que se tome en cuenta la realidad del mercado laboral en México y el mundo que está excluyendo cada vez más a hombres y mujeres de cuarenta años en delante de las filas del trabajo. Es un asunto para considerar seriamente porque sin trabajo, ahora sí que ¿cómo ahí qué?). Lo dicho por De la Cruz contrasta con la postura del presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos: “además de homogeneizar los distintos sistemas de pensiones y revisar los actuales regímenes de privilegio, es necesario armonizar la edad de retiro en los distintos sistemas de pensiones [...] y que los trabajadores puedan aumentar sus ahorros”.
En algo tiene razón: la revisión (yo diría supresión) de los regímenes de privilegio, léase CFE, Pemex y la burocracia en general. Por un lado, la edad: en el sistema de educación pública los docentes tienen opción de retirarse a los 50 años, por ejemplo. Y por otro, los montos, en la CFE y en PEMEX los jubilados “reciben 8.8 y 6.7 veces más que los pensionados del IMSS, respectivamente” según se publicó aquí ayer (recomiendo ampliamente el trabajo). Y también sé que a las pensiones mensuales, tratándose de trabajadores al servicio del Estado, hay que sumar aguinaldos o bonos de fin de año. Es raro algo así con trabajadores jubilados de la iniciativa privada por ni decir que inexistente.
Por lo pronto, aunque no es para desentenderse, el Presidente Andrés Manuel López Obrador ya dijo: “Mientras yo sea Presidente no va a modificarse la edad (de retiro), en lo que a nosotros nos corresponde”. Esto quiere decir que, si le corresponde a alguien más puede hacerlo, los empresarios podrían cabildear por ejemplo o la Afores o los diputados; cabe decir que se acaba de presentar una iniciativa —fue turnada a comisiones— para aumentar la pensión a los trabajadores del ISSSTE, de 10 a 25 salarios mínimos... qué padre.
La cuestión es no perder de vista el tema porque a la mayoría de los mexicanos nos atañe, estudiarlo, entenderlo lo más posible a sabiendas de que se discutirá más temprano que tarde. Me encontré dos documentos (hay muchísima información) que creo podrían servir para tener antecedentes y una idea más cercana de qué se trata: “Diagnóstico del sistema de pensiones mexicano y opciones para reformarlo” del Banco Interamericano de Desarrollo publicado apenas en marzo de este año (Diagnóstico BIDy, del sexenio pasado, “Las pensiones en México y el mundo”, una publicación de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro, Consar: ("Las pensiones en México y el mundo").

Columna publicada en El Informador el sábado 12 de octubre de 2019.

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